Como vimos en distintas oportunidades, los probióticos son bacterias buenas que ingerimos con los comestibles y que una vez en nuestro sistema digestivo nos asisten, aportándonos distintos provecho. Entre ellos, recalca la optimización de la flora, la digestión y el tránsito intestinal y del sistema inmunitario. Como el 70% de los sistemas de nuestro cuerpo están relacionados con el intestino, y, además, el intestino es un órgano inmenso que ocupa entre 5 y 8 metros, si trabaja bien y nuestro cuerpo requiere dedicarle pocos elementos, nuestra salud va a ser bastante superior.

Nuestros Guías: Encarni Reche,  Encarnación Reche. Médico por la Universidad de Boston

De ahí la importacia de dar de comer nuestra flora intestinal con abundante fruta y verdura, comestibles prebióticos, y “suplementarnos” con probióticos. Y colocosuplementarnos entre comillas porqué, como vamos a detallar ahora tenemos la posibilidad de tomar productos probióticos sin obligación de proceder a la farmacia a adquirir comprimidos o sobres con bacterias en polvo. Se tienen la posibilidad de, y es la manera más óptima de llevarlo a cabo, tomar probióticos por medio de los comestibles.

Los suplementos alimenticias de tipo generalista, en su mayoría con apariencia de comprimidos, cápsulas y sobres con polvos para tomar con líquido, no aportan un contenido en bacterias muy alto y no está bastante claro si verdaderamente llegan a desarrollar funcionalidad alguna al digerirlas, o bien es muy suave. Exceptuamos los suplementos probiótico con actividad demostrada en ensayos clínicos, pero es algo de lo que la mayor parte carecen. Además, tienden a ser muy caros en relación a su aporte.

En cambio, los comestibles probióticos tienen efecto inmediato en nuestro medio intestinal, compuesto de billones de bacterias. Por eso hemos listo esta lista, para que sepas cuáles son los comestibles Probióticos que te vendría bien integrar en tu todo el tiempo.

LISTA DE COMESTIBLES PROBIÓTICOS PARA INTEGRAR EN TU DIETA DIARIA

Explicaremos los comestibles con probióticos frecuentes. El orden que se va a continuar es de más a menos corriente, o más díficil de hallar en la dieta occidental.

YOGURT

¿Sabías que hay 100 millones de bacterias en un yogurt?

Pero no sólo eso, el yogur es una fuente de proteína de calidad que asisten a sostener el control del apetito y contribuye péptidos de reducido tamaño que regulan la tensión y tienen la posibilidad de tener alguna acción contra la resistencia a la insulina. Contribuye calcio y está básicamente libre de lactosa.

Es primordial que tomemos yogur natural, sin azúcar ni edulcorantes agregados. Si tenemos la posibilidad de tomarlo ecológico mejor, debido a que su aporte sobre nutrición va a ser mejor al seguir de animales mejor alimentados.

De igual modo, escogeremos predominantemente yogur de leche de cabra u oveja, debido a que la leche de vaca es más inmunoestimuladora que estas (esto supone que puede ser amenazante para personas sensibles, entre otras cosas para anomalías de la salud autoinmunes o si se padece acné). A pesar de que los veganos no toman lácteos, además hay yogures para ellos, ya que la industria ha creado yogures vegetales, pudiéndose de esta forma beneficiar de su acción probiótica aunque en esta situación el contenido sobre nutrición es muy diferente.

ACEITUNAS Y ENCURTIDOS

¡Sí, las aceitunas, pepinillos y demás encurtidos en vinagre son una fuente de probióticos!

Cuando ponemos estos vegetales en salmorra y acidificamos sutilmente con vinagre se muestran levaduras y bacterias lácteas que mejoran sus caracteristicasalimenticias (eliminan el amargor y hacen más blanda la textura de la piel).

Estos microorganismos quedan poderosamente adheridos a la piel de los vegetales y en suspensión en la salmorra. Su número no es gigantesco como en el yogur, pero no es repudiable y, además, son otras especies, con lo que aumentamos la biodiversidad intestinal y van acompañadas de una fuente prebiótica, el vegetal. ¡Estos comestibles con probióticos son increíbles!

En esta situación debemos tener precaución con el aporte de sal, que puede ser alto. Además hay que tomar en cuenta que muchas preparaciones industriales llevan varios aditivos no deseables. Y lo de mayor relevencia, si deseamos favorecernos de su poder probiótico, debemos confirmarnos que sean artesanas, debido a que las industriales sufren procesos térmicos de conservación bastante fuertes que básicamente destruyen todos los microorganismos.

El Ajo Negro

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EL QUESO CRUDO

¡Queso! ¡Qué maravilla!

En el caso de que seas un apasionado de este alimento te va a gustar mucho entender que el queso elaborado con leche cruda (en cuanto se pasteuriza pierde su contenido en bacterias) son especialmente ricos en probióticos, introduciendo los grupos thermophillus, bifudus, bulgaricus y acidophilus. En esta situación aplica lo mismo que lo explicado para el yogur, predominantemente tomar queso de oveja y cabra y es un alimento probiótico al que los veganos no pueden entrar.

EL KÉFIR DE LECHE

El kéfir de leche es cada vez más popular y está presente cada vez en más supermercados, debido a que se antoja primordial para la multitud que escoge continuar una dieta probiótica. Puedes hallar kéfir de leche tanto ecológico como común, de esta forma como de leche de cabra y vaca, que son los frecuentes. Su contenido en probióticos es algo más grande que el de un yogur pero en cambio la diversidad de microorganismos que aportan es mucho más grande.

Además, al ser completamente líquido, su digestión y acción es un poquito mejor que la del yogur. Nos volvemos a hallar con un lácteo fermentado, que se ve que son las estrellas entre los productos probióticos de occidente. Repetimos lo antes citado, intolerantes, personas sensibles y veganos o vegetarianos, no pueden entrar a este probiótico. Para el resto de personas, predominantemente de cabra y ecológico.

EL KÉFIR DE AGUA

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El kéfir de agua tiene un contenido más grande de microorganismos por ml que el yogur. Además, al ser básicamente agua con microorganismos su absorción y acción es instantánea debido a que no se invierten elementos metabólicos en digerir proteínas ni grasas lácteas, como sí sucede en el yogur o en el kéfir de leche.

Es un probiótico alimento -bebida- saludable apto para veganos, vegetarianos, personas con sensiblidades alimentarias (lactosa, celíacos) y personas que siguen dietas particulares como la paleolítica o evolutiva. Aunque cada vez el kéfir de agua es una bebida más popular, es todavía un alimento muy minoritario ya que hasta hace muy poco no estaba comercialmente. De hecho, por ese fundamento creamos nuestro refresco de kéfir de agua ecológico Prokey.

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SAUERKRAUT O COL FERMENTADA

El sauerkraut o col fermentada podría haberlo agregado con los encurtidos. De hecho se elabora de la misma manera, con salmuera. Lo he puesto además porque comunmente no se debe tener precaución, la mayoria de las veces es crudo, no pasteurizado, con lo que estamos seguros que sus microorganismos están vivos.

Tampoco es tan habitual en España como las aceitunas o encurtidos. Aunque en USA y fundamentalmente en Alemania y países aledaños sí es un alimento muy consumido. También es un enorme prebiótico, con lo que combinamos la acción prebiótica-probiótica. Es apto para veganos, seguramente no hay ningún vegetariano o vegano que no gaste col fermentada, aunque a la gente generalmente no le suene bastante.

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ALIMENTOS ORIENTALES, MISO, TEMPEH, DOENJANG, KIMCHI y NATO

Aunque tienen propiedades alimenticias diferentes he unido en un punto el miso y el tempeh. La causa es que los dos son comestibles orientales y tienes que proceder a shoppings perfeccionados a comprarlos. Tampoco se consumen de manera regular por el grupo de la gente.

El miso es una pasta de habas de soja y arroz fermentada en la mayoría de los casos por Lactobacillus acidophylus. Es un condimento muy utilizado en la cocina asiática, siendo aquí lo verdaderamente popular la sopa de miso.

El tempeh es otra forma de soja fermentada, en ese caso semejante en textura y fachada a un queso fresco. Se puede ahumar, freír, llevar a cabo a la plancha. Proporciona bastante juego en cocina y es muy apreciado como fuente proteíca por veganos y vegetarianos.

Pero debemos tomar en cuenta que los distintos tratamientos culinarios reducirán o van a elminar completamente su poder probiótico.

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KOMBUCHA Y KVASS

La kombucha y el kvass son dos bebidas fermentadas probióticas. De la kombucha ya hablamos en el blog en alguna oportunidad, su más grande provecho es la optimización de la digestión. Ya se puede hallar kombucha comercial, antes sólo quedaba hacérsela en el hogar. De hecho, todos los días hay más artesanos haciéndola. Su gusto tiende a acordarse al vinagre.

El kavass es una bebida clásico del este de Europa. Se elabora con centeno o malta aunque además se agregan raíces y zanahorias en preparaciones modernas. Tiene un gusto agrio, contribuye un enorme conjunto de bacterias lácticas y su funcionalidad más popular es de limpieza de sangre e hígado.

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Chocolate Negro Probiótico 

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CHUFA 

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ALIMENTOS PROBIOTICOS CASI DESCONOCIDOS

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